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viernes, 8 de mayo de 2015

Hilda Hilst poeta



Hilda de Almeida Prado Hilst conocida como Hilda Hilst (Jaú, 21 de abril de 1930 - Campinas, 4 de febrero de 2004) fue una poeta, cronista y dramaturga brasileña, considerada por la crítica una de las escritoras en lengua portuguesa más importantes del siglo XX.

Hilda de Almeida Prado Hilst fue la única hija del periodista, poeta, ensayista y empresario cafetero Apolônio de Almeida Prado Hilst, hijo de Eduardo Hilst, inmigrante de Alsacia-Lorena, y de Maria do Carmo Ferraz de Almeida Prado. Su madre, Benecilda Vaz Cardoso, era hija de inmigrantes portugueses. Sus padres se separan en 1932 y su madre se muda a Santos con Hilda y Ruy Vaz Cardoso, hijo de su primer matrimonio. En 1935 Apolônio es diagnosticado como paranoico esquizofrénico.

En 1937 Hilda entró como alumna interna en el colegio Santa Marcelina, en São Paulo, donde cursó primaria y secundaria con brillantes resultados. En ese año su madre le reveló la enfermedad de su padre. En 1945 comenzó la secundaria en el Instituto Presbiteriano Mackenzie, donde permaneció hasta el final del curso. En 1948 entró en la Facultad de Derecho de la Universidad de São Paulo, donde conoció a la escritora Lygia Fagundes Telles, que sería su gran amiga durante toda la vida. Su primer libro, Presságio, publicado en 1950, fue recibido con gran entusiasmo por los poetas Jorge de Lima y Cecília Meireles. En 1951 publicó su segundo libro de poemas Balada de Alzira.

En 1952 termina la carrera de Derecho. La lectura de Carta al Greco, del escritor griego Nikos Kazantzakis, marcó para Hilda un punto de inflexión: decide alejarse de la agitada vida en São Paulo y en 1964 comienza a vivir en la hacienda con su madre, cerca de Campinas, donde se está construyendo una casa propia dentro de la finca. Finalizados los trabajos de construcción, Hilda se muda a la llamada Casa do Sol, cuidadosamente diseñada por la autora para ser un espacio de inspiración y creación artística. Hilda vivió allí el resto de su vida y hospedó a diversos escritores y artistas durante varios años. Los escritores Bruno Tolentino y Caio Fernando Abreu fueron algunos de los huéspedes de la Casa do Sol.

Hilda Hilst se dedicó a lo largo de algunos años enteramente a la dramaturgia: crea piezas de teatro con el  deseo de comunicarse con urgencia, en un período en que se vivía en Brasil la represión impuesta por la dictadura militar. Publica en 1970 su primera obra en prosa: Fluxo-floema. Según la investigadora alemana Mechthild Blumberg (Universidad de Bremen), la prosa de Hilda Hilst se caracteriza por la “inquietud  metafísica y la invención literaria”. Luego de una larga experiencia como poeta y una fase de intensa creación de textos dramáticos, sus  primeros textos en prosa son compuestos con un lenguaje trabajado intensamente, con atención semejante al de la creación de poemas; novelista y poeta se juntan en una misma experiencia creativa.

Hilda Hilst fue desenfadada y precoz para su época. Se manifestó en público a favor de la libertad femenina, en el ámbito profesional, artístico, amoroso y erótico. Detestaba que la llamaran poetisa. La escritora Lygia Fagundes Telles, su gran amiga, cuenta que cierta vez Hilda se presentó en la antigua sala de té de Mappin, en São Paulo, afirmando: "soy poeta". El escritor Guilherme de Almeida, que estaba presente, comentó que la palabra poetisa ya estaba desmoralizada y que cuando una escritora era seria, se consideraba poeta. Hilda Hilst construyó un universo de la mujer que asume su papel social, en un mundo normalmente dominado por el punto de vista masculino: "Me dio el amor este don:/ Para decir en poesía./ Poeta y amante es lo que soy..." (en: Trovas de amor para um amado senhor). Su trabajo creativo y sus actitudes, poco comprendidos por los conservadores, contribuyeron mucho para una amplitud de visión: "Una de las funciones de los escritores está en ampliar los horizontes morales de donde vive. [...] Hilda produjo una buena literatura y sabía desafiar la moral", afirma el escritor Fernando Bonassi (en: O Estado de São Paulo, 5/2/04).

La escritora Hilda Hilst murió en la madrugada del día 04 de febrero de 2004, a los 73 años, en Campinas (interior del estado de São Paulo). Tras su fallecimiento, el amigo Mora Fuentes lideró la creación del Instituto Hilda Hilst. El IHH tiene como principal misión el mantenimiento de Casa do Sol, su acervo y la vocación de puerto seguro para la creación intelectual.

Estilo Literario
Cristiane Grando ha dicho de su obra: Leer a Hilda Hilst es como sumergirse en un universo literario complejo y laberíntico (...) Leer a Hilda Hilst significa entrar en  contacto con la dinámica de la vida, con la complejidad humana y del propio texto, en una combinación refinada de sonidos, palabras e  imágenes: “No me busques ahí / Donde los vivos visitan / A los llamados  muertos. / Búscame / Dentro de las grandes aguas / En las plazas / En el  fuego corazón / Entre caballos, perros, / En los arrozales, en el  arroyo / O junto a los pájaros / O en el reflejo / De otro alguien, /  Subiendo un duro camino // Piedra, semilla, sal / Pasos de la vida.  Búscame ahí./ Viva.”

Premios y obras
Hilda Hilst escribió durante casi cincuenta años y fue galardonada con los más importantes premios literarios de Brasil. En 1962 recibió el Premio PEN Clube de São Paulo, por Sete Cantos do Poeta para o Anjo (Massao Ohno Editor, 1962). En 1969 la obra O Verdugo fue galardonada con el premio Anchieta, uno de los más importantes premios del país en su momento. El mismo año la cantata Pequenos Funerais Cantantes, compuesta por su primo, el compositor Almeida Prado, sobre el poema homónimo de Hilda, dedicado al poeta portugués Carlos Maria Araújo, resultó ganadora en el I Festival de Música da Guanabara*

La Asociación Paulista de Críticos de Arte (Premio APCA) consideró Ficções (Ediciones Quíron, 1977) el mejor libro del año. En 1981 la misma asociación galardonó a Hilda Hilst con el Grande Prêmio da Crítica al conjunto de su obra. En 1984 la Cámara Brasileña del Libro concedió el premio Jabuti a Cantares de Perda e Predileção  (Massao Ohno - M. Lydia Pires y Albuquerque editores, 1983), y el año siguiente, la misma obra recibió el premio Cassiano Ricardo (Clube de  Poesía de São Paulo). Rútilo Nada, publicado en 1993 por la editorial Pontes, recibió el premio Jabuti al mejor cuento. Finalmente, el 9 de agosto de 2002 fue galardonada en la 47ª edición del Premio Moinho Santista en la categoría poesía.

La escritora además participó, a partir de 1982, del Programa del Artista Residente, de la Universidade Estadual de Campinas - UNICAMP.

Sus obras abordan temáticas socialmente controvertidas. Sin embargo, según confesó la propia escritora en una entrevista a Cadernos de Literatura Brasileira*, su trabajo buscaba esencialmente reflejar la difícil relación entre Dios y el hombre.

Una serie de libros de Hilst fueron publicadas originalmente por pequeños editores brasileños, pero a partir de 2001, Editora Globo , la rama editorial de la brasileña organización de medios Globo , comenzó a volver a emitir casi todas sus obras, como parte de su Coleção Reunidas de Hilda Hilst. ,
 Algunos de sus textos han sido traducidos del portugués al Francés , Inglés , Italiano y Alemán . En marzo de 1997, sus obras Com meus olhos de Cão y una obscena Senhora D fueron publicados por Éditions Gallimard , traducido por Maryvonne Lapouge. A obscena Señora D se traduce en Inglés como The Obscene Madame D en colaboración por Nathanaël y Rachel Gontijo Araújo , y publicado conjuntamente por Nightboat Books en Nueva York y un Bolha Editora en Río de Janeiro en 2012.

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Hilda Hilst: Trece poemas
Publicado el 1 enero, 2009 por reinhard huamán mori

Hilda Hilst

XVI
               O que nós vemos das coisas são as coisas.
               (Fernando Pessoa)
Las cosas no existen.
Lo que existe es la idea
melancólica y suave
que hacemos de las cosas.
La mesa de escribir es hecha de amor
y de sumisión.
En tanto
nadie la ve
como yo la veo.
Para los hombres
es hecha de madera
y esta cubierta de tinta.
Para mí también
más la madera
protege su interior
pues su interior es humano.
Los libros son criaturas.
Cada página un año de vida,
cada lectura un poco de alegría
y esta alegría
es igual al consuelo de los hombres
cuando inquietos permanecemos
en respuesta a sus inquietudes.
Las cosas no existen.
La idea, sí.
La idea es infinita
igual que el sueño de los niños.
                         de: Balada de Alzira [1951]


NO HABLEMOS.
Y que las voluntades primeras
permanezcan
gigantes y sin forma
sin ningún camino
para el mundo de los hombres.

IV
[fragmento]
               A Vinicius de Moraes
En la hora de mi muerte
estarán a mi lado más hombres
infinitamente mas hombres que mujeres.
(Porque fui más amante que amiga)
Sin duda dirán las cosas que no fui.
Como entonces con gran generosidad:
No era mal poeta la pequeña Hilda.
Tendré rosas en el cuerpo, en las manos, en los pies.
Son todos tan delicados
tan delicados…
                         de: Balada do Festival [1955]


16
No es verdad.
No todo fue tierra y sexo
en mí
si soy poeta
es porque también
se hablar de amor
suavemente.
Y como nadie se
acariciar
la cabeza de un perro
en la madrugada.

19
Prométeme que te quedarás
hasta que la madrugada te sorprenda.
Aunque no sea abril
esta noche que desciende
aunque no haya estrella y esperanza
en este amor que amanece
                         de: Roteiro do silêncio [1959]


I
Nave
ave
molino
y más todo seré
Para que sea leve
mi paso
en vuestro
camino
                         de: Trovas de muito amor para um amado senhor [1960]


III
Tu sueño no es un sueño común.
Extiendes la vigilia
y aprendes a través de la oscuridad.
También así
el mar reposa.
                         de: Pequenos funerais cantantes ao poeta Carlos Maria de Araújo [1967]


IV
¿Qué boca ha de roer el tiempo? ¿Qué rostro
Ha de llegar después del mío? ¿Cuantas veces
el tejido leve de mi soplo ha de posarse
sobre la blancura agitada de tu pecho?
¿Atravesáremos juntos las grandes espirales
la arteria extendida del silencio, el vacío
la planicie del tiempo?
Cuantas veces dirás: vida, estrella vespertina, magna-marina
y cuantas veces diré: eres mío. Y en las distendidas
tardes, de largas lunas, de madrugadas agónicas
sin poder tocarte. Cuantas veces, amor
Una nueva vertiente ha de nacer en ti
y cuantas han de morir en mí.
                         de: Júbilo, memória, noviciado da paixão [1974]


XIX
Si yo supiese
tu nombre verdadero
te tomaría
húmeda, tenue
y entonces descansarías.
Si susurraras
tu nombre secreto
en mis caminos
entre la vida y el sueño
Te prometo, muerte,
la vida de un poeta. La mía:
Palabras vivas, Fuego, Fuente.
Si me tocaras,
amantísima, blanda
como fui tocada por los hombres
en vez de Muerte
te llamo Poesía
Fuego, Fuente, Palabra viva
Suerte.

XXII
No me busques ahí
donde los vivos visitan
a los llamados muertos.
Búscame
dentro de las grandes aguas
en las plazas
en el fuego corazón
entre caballos, perros,
en los arrozales, en el arroyo
o junto a los pájaros
o en el reflejo
de otro alguien,
subiendo un duro camino
Piedra, semilla, sal
pasos de la vida. Búscame ahí.
Viva.
                         de: Da morte. Odes mínimas [1980]


VI
Hoy te canto y después en el polvo que he de ser
te cantaré de nuevo. Y tantas vidas tendré
cuantas me darás para otra vez amanecer
intentándote buscar. Porque vives de mí, Sin Nombre,
sutilísimo amado, relincho del infinito, y vivo
porque sé de ti tu hambre, tu noche de herrumbre
tu pasto es mi verso rociado de tintas
y de un verde negro tu casco en los arenales
donde me pisas hondo. Hoy te canto
y después enmudezco si te alcanzo. Y juntos
iremos a teñir el espacio. De luces. De sangre.
De sangre.
                         de: Sobre a tua grande face [1986]


XXII
Que las barcazas del Tiempo me devuelvan
la primitiva urna de palabras.
que me devuelvan a ti y a tu rostro
como lo conocí desde siempre: punzante
pero centellante de vida, renovado
como si el sol y el rostro caminasen
porque venia de uno la luz del otro.
Que me devuelvan la noche, el espacio
para sentirme tan vasta y poseída
como si aguas y maderas de todas las barcazas
se hiciesen materia rediviva, adolescencia y mito.
Que te devuelva la fuente de mi primer grito.


III
Descansa.
El hombre ya se hizo
el oscuro ciego rabioso animal
que pretendías.
                         de: Amavisse [1989]
  traducción: Leo Lobos
http://en.wikipedia.org/wiki/Hilda_Hilst
http://ginebramagnolia.wordpress.com/2009/01/01/hilda-hilst-trece-poemas/
http://www.lasiega.org/index.php?title=Hilda_Hilst._%22Soy_la_mujer_que_anda_conmigo%22._Poes%C3%ADa_y_cr%C3%ADtica_literaria_brasile%C3%B1a_contempor%C3%A1nea.
http://carrancasliterarias.blogspot.com/2012/04/hilda-hilst-lirica-erotica-densa-e.html
http://veja.abril.com.br/blog/meus-livros/tag/hilda-hilst/
http://www.angelfire.com/ri/casadosol/hhilst.html

3 comentarios:

  1. Esta traducción tanto del texto como de los poemas de Hilda Hilst son de mi autoria intelectual. Los Trece poemas de Hilda Hilst publicados en la Revista Ginebra Magnolia y el texto teórico de la profesora y poeta Cristiane Grando. Les solicito corregir esta omisión. Gracias

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    1. Hemos añadido su autoría. lLs link de acceso a la fuente siempre estuvieron . Le agradecemos la oportunidad de conocer el trabajo de una mujer brasileña en nuestra lengua . GRACIAS. Ojala podamos añadir información sobre otras mujeres parecidas de Brasil.

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  2. ¿Qué poemas hizo durante la dictadura del 64 relacionados a eso?

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