En este día 1 de noviembre en 1797, el padre de Jane Austen envió al vendedor de libros Thomas Cadell el libro de su hija, Primera impresiones (más tarde rebautizado como Orgullo y prejuicio). La novela fue rechazada.
Hoy, día 1 de noviembre, queremos tomarlo como nuestro, recordando la consecución de un reto de Jane Austen, que refleja lo duro del camino para conseguir nuestros objetivos y nuestro reconocimiento tras sumados e indecibles obstáculos.
Solo nosotras sabemos de nuestra valía y queremos tomar fuerzas para seguir en pos de nuestros sueños, lo que sin duda además de ayudarnos a nosotras personalmente, ayudarán al mundo que nos rodea.
Solo nosotras sabemos de nuestra valía y queremos tomar fuerzas para seguir en pos de nuestros sueños, lo que sin duda además de ayudarnos a nosotras personalmente, ayudarán al mundo que nos rodea.
Jane desde la oscuridad de su educación patriarcal dio rienda suelta a su creatividad, observando su realidad y trasmitiéndonosla, lo que nos ha ayudado a su análisis. Puso en valor el mundo de las relaciones humanas y la realidad de la vida de las mujeres, su dependencia, subordinación, precaria y parcial educación, falta de libertad ...
En sus novelas hemos bebido y aprendido a cuestionar el menosprecio a las que las mujeres eran sometidas y como su vida dependía del hombre que las eligiera.
Aunque no fue considerada una gran novelista, hasta entrado el siglo XIX. Aunque la mayoría de sus obras aparecieron bajo seudónimo, fueron, sin embargo, ampliamente conocidas y recibieron numerosas críticas positivas, las criticas negativas también fueron abundantes quizá la peor crítica fue la de Charlotte Brontë, diciendo que todo lo que encontró tras leer Orgullo y prejuicio era «un preciso daguerrotipo de una faceta común; un jardín cerrado y cuidadosamente cultivado, de bordes limpios y flores delicadas; pero ni una vivida y brillante fisionomía, ni campo abierto, aire fresco, colina azul, o arroyo estrecho».
La primera reacción del escritor estadounidense Mark Twain fue el rechazo:
"¿Jane Austen? Porque, voy aún más lejos al decir que cualquier biblioteca es buena siempre que no contenga algún volumen por Jane Austen. Incluso si no tiene otro libro".
Los círculos académicos siempre han considerado a Austen como una escritora conservadora, mientras que la crítica feminista más actual apunta que en su obra puede apreciarse una novelización del pensamiento de Mary Wollstonecraft sobre la educación de la mujer.
Leyendo sus novelas podemos entender las estrecheces económicas por las que ella, su madre y su hermana, se vieron obligadas a pasar tras la muerte de su padre al amparo de la "caridad" de sus hermanos.
Pese a su corta vida, ya que falleció a los 41, años su influencia en el mundo sigue siendo patente en las numerosas películas realizadas sobre su obra y su vida que se recrean en íntimos matices invisibles antes de que ella los mostrara. Sin duda si ella fuese capaz de ver su legado se sentiría profundamente satisfecha. Para nosotras fue una total HEROÍNA que tuvo que afrontar las dificultades de la sociedad patriarcal en su camino de realización personal .
https://janeaustencastellano.wordpress.com/biografia/
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