Helen Bailey (22 de agosto de 1964, Newcastle upon Tyne, Reino Unido - abril 2016, Royston, Reino Unido) fue escritora que buscando pareja conectó con su asesino.
Helen Bailey, una mujer risueña y vitalista, hizo su fortuna con una veintena de libros de literatura infantil y juvenil, incluida su exitosa serie «Electra». Había nacido en un pequeño pueblo norteño, cerca de Newcastle. Le gustaba escribir, la cocina y era hincha del Arsenal. Estudió psicología y antes de triunfar con la literatura trabajó en el mundo del marketing, donde conoció a su marido, John, un ejecutivo de patentes. Estuvieron juntos 22 años, 15 de ellos casados. Una excelente relación truncada por la tragedia. En 2011, John murió ahogado cuando veraneaban en Barbados. «Desayuné casada y a la hora de comer era viuda».
Para superar su dolor, Helen comenzó a escribir un blog para viudos, «Planeta pena». Allí, con humor y sinceridad, contaba su lucha con el duelo. Ian Stewart, que había enviudado en 2010, entró en su vida vía internet. «Me llegó su foto en Facebook y me sorprendió. Pensé que conocía aquel hombre. Pero luego me di cuenta de que jamás lo había visto. Era un atractivo viudo de pelo gris, que desde el primer momento en que nos encontramos sentí como si lo hubiese conocido de toda la vida».
Pronto comenzaron a salir. Fueron pareja cuatro años y vivieron juntos tres, en una mansión de 1,5 millones de euros situada en Royston, al Norte del Gran Londres, donde acabó perdiendo la vida. Helen adoraba a Ian, al que denominaba con las siglas GGHW («gorgeous grey-haired widower», el hermoso viudo del pelo gris).
Ella planeaba una boda. Él planeaba un asesinato. Helen Bailey se ilusionó al reencontrar el amor tras enviudar trágicamente en 2011. pero su nueva pareja, Ian Stewart, de 56 años, acabó convirtiéndose en su despiadado y cínico asesino. La drogó durante tres meses con pastillas de dormir, asfixiándola finalmente. Ocultó su cadáver y el de su perro en una fosa séptica victoriana, situada en el garaje de la mansión que compartían en el rural del centro de Inglaterra, y fingió que Bailey había desaparecido. Su objetivo era hacerse con su fortuna. Poco antes de cometer el crimen se había convertido en el principal beneficiario del testamento de la novelista, que tenía 51 años
Confiado en que no sería descubierto, Stewart incluso se fue dos semanas de vacaciones a Mallorca dos meses después del asesinato. Al volver de España, el 11 de julio de 2016, fue detenido y posteriormente condenado. Escuchó el veredicto impasible. Ahora se sospecha que pudo haber matado también a su primera mujer, Diana, una enferma de epilepsia fallecida en 2011 en extrañas circunstancias.
Según ha destapado la autopsia, Ian Stewart comenzó a drogarla en febrero con zopiclone, las pastillas para dormir que consumía él, un ingeniero informático retirado por problemas de salud. La novelista comentó a su madre su inexplicable cansancio. También se ha sabido que hizo búsquedas en Google con las frases «me quedo dormida trabajando» y «me duermo por las tardes».
El 11 de abril fue vista por última vez, paseando a su querido perro Boris. Ese día, Stewart, que tiene dos hijos veinteañeros de su primer matrimonio, la asfixió. Tras ocultar el cuerpo en la cloaca del garaje, se fue a ver jugar a su hijo a los bolos y luego encargó comida china a domicilio. También llamó a una inmobiliaria para poner en venta una de las casa de Helen. A la mañana siguiente ordenó al banco subir su asignación mensual desde la cuenta de ella de 600 libras a 4.000. Más tarde renovó su abono personal del Arsenal ( con un coste superior a las 3000 libras).
Tardó cuatro días en denunciar la desaparición y cuando lo hizo fue una «charada», en expresión del juez. Llamó a la policía diciendo que ella había dejado una nota en la que comentaba que «necesitaba espacio» y se había ido a su casa de vacaciones de Kent. Su cinismo llegó incluso a la publicación de un sentido mensaje mientras la policía los vecinos buscaban a Helen. «No solo curaste mi corazón hace cinco años. Lo hiciste más grande, fuerte y amable. Ahora me siento sin corazón. Nuestros planes eran perfectos, pero sin ti no tienen sentido». La pareja planeaba casarse en un hotel vecino.
Durante tres meses se buscó el cadáver sin éxito, pero la policía comenzó a sospechar de Stewart. Fue detenido el 11 de julio, cuando volvió de sus vacaciones mallorquinas y a los cuatro días se halló el cuerpo. La policía grabó en vídeo el momento de la detención. Puro teatro. El asesino finge un gran desconcierto cuando lo arrestan y hasta se sienta simulando un mareo. En el juicio el hermano de la víctima reveló que en su última visita a la casa de Royston, Helen bromeó diciendo que la fosa victoriana del garaje «sería un buen lugar para ocultar un cadáver». Ian Stewart, que lo escuchó, aprovechó la idea.
En el juicio el asesino se declaró «no culpable» y se defendió con una fábula. Alegó que dos individuos llamados Nick y Joe, relacionados con el marido de Helen, la secuestraron y que incluso se la llegaron a poner al teléfono. Pero no pudo denunciarlo porque lo amenazaron con matarla.
El juez desestimó la patraña y calificó a Stewart de «hombre cruel y tortuoso». Los vecinos comentan que era una persona de poquísimas palabras, cuyo talante taciturno contrastaba con la jovialidad de su pareja. Su primera mujer, Diana, murió cuando estaba a solas con él en un jardín. En su momento no se vio nada sospechoso y se achacó a un ataque de epilepsia, un mal que ella padecía desde su infancia. Pero ahora se reabrirá el caso, a pesar del problema de que el cadáver fue incinerado.
Al abandonar el juzgado rumbo a la cárcel para pasar 34 años a los que fue condenado, Stwart buscó la mirada de sus dos hijos, presentes en la sala. Ellos le torcieron la cara.
https://www.theguardian.com/uk-news/2016/apr/18/fears-grow-missing-childrens-author-helen-bailey-hertfordshire?CMP=share_btn_fb
http://www.abc.es/estilo/gente/abci-helen-bailey-escritora-buscando-pareja-asesino-201702260100_noticia.html
http://www.bbc.com/news/uk-england-beds-bucks-herts-36093016
http://www.bbc.com/news/uk-england-beds-bucks-herts-39051242
http://www.bbc.com/mundo/noticias-39059640
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