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viernes, 29 de noviembre de 2024

Laura Bassi filósofa, profesora y científica italiana


Laura Bassi (Bolonia,  29 de noviembre de 1711 - Bolonia, 20 de febrero de 1778 ) fue una filósofa, profesora y científica italiana.


Niña prodigio, recibió instrucción en matemática, filosofía, anatomía, historia natural y lenguas de Gaetano Tacconi, Profesor de Medicina en la Universidad de Bolonia. Bassi desarrolló interés por la ciencia y fue alentada por su familia y amigos, entre ellos el Cardenal Próspero Lambertini (futuro Papa Benedicto XIV), para buscar un puesto académico.


El 17 de mayo  de 1732 la Universidad de Bolonia le concedió un doctorado honorario, debido a sus evidentes capacidades intelectuales. De nuevo el evento levantó gran interés y, en un acto público que tuvo lugar en el pabellón de Hércules del Palacio Comunal, Bassi recibió una corona de laurel de plata y dio un discurso de aceptación en latín. También fue escrita una poesía en su honor.

El 27 de junio, con el fin de obtener una plaza de profesora en la Universidad de Bolonia, se sometió a un examen público, que de nuevo fue un éxito, con el que obtuvo una plaza de profesora de física, con un salario de 500 liras al año; convirtiéndose así en la primera mujer en obtener un puesto de profesora de física en una universidad.

En octubre de ese mismo año dio su primera conferencia en la universidad y a ella acudieron personalidades tanto de dentro como de fuera de la comunidad académica. La conferencia se tituló De corpore aqua naturali Elemento aliorum corporum parte universi y posteriormente fue publicada.
Medalla en honor de Laura Bassi.


Para conmemorar todos estos eventos, el Senado de Bolonia creó una medalla en su honor, en la que ella aparecía en una cara y Minerva –la diosa de la sabiduría– en la otra, junto con la inscripción ‘Soli cui fas vidisse Minervam.‘


Como mujer, hasta entonces había tropezado con numerosas dificultades. Por ejemplo, podía celebrar conferencias públicas sólo con el consentimiento del Senado. En 1749, para paliar estas dificultades, inauguró un laboratorio privado, que se hizo famoso en toda Europa y acogió a científicos de renombre y jóvenes destinados a ser famosos. Sólo en 1776 el Senado de Bolonia le concedió la cátedra de física experimental en el Instituto de Ciencias.

Estas dificultades se vieron un poco aliviadas cuando en 1738 se casó con el médico y físico Giuseppe Veratti. Según ella misma comenta: ‘He elegido a una persona que camina por mi misma senda de aprendizaje y por su larga experiencia estoy segura que no me disuadirá de ella.’

Su matrimonio le facilitó la carrera profesional, a pesar de los doce hijos que tuvo, ya que a partir de ese momento era su marido, en vez del Senado, el que debía concederle los permisos necesarios para impartir conferencias públicas y desarrollar algunos otros aspectos de su profesión. La pareja compartió no solo vida doméstica sino también trabajo profesional y curiosidad intelectual.

En 1745 el ya Papa Benedicto XIV creó una nueva sección en el Instituto de Ciencias, la Benedettini, con el objetivo de estimular nuevas investigaciones científicas en Bolonia, siguiendo el modelo de la Academia de Ciencias de París. Veinticuatro académicos fueron aceptados entre los Benedettini, con una recompensa económica de cincuenta liras a condición de que presentasen al menos un trabajo anual sobre nuevos hitos científicos. Bassi no estaba entre los veinticuatro nombrados inicialmente, pero ella no se conformó y solicitó, a través de un amigo influyente, ser incluida en este selecto grupo. El Papa creó una nueva plaza, la vigésimo quinta, entre los Benedettini para que fuese ocupada por Bassi.

A pesar de ser ya una mujer casada, en 1749 –de nuevo para paliar las dificultades que tenía en el desempeño de su profesión– inauguró junto a su marido un laboratorio y una escuela privada de física experimental en su domicilio, que pronto se hizo famosa en toda Europa, y acogió tanto a personas de ciencia de renombre como a estudiantes con interés sobre todo en la física newtoniana, toda una novedad en ese momento y que no era todavía contemplada en los cursos de la universidad. Sus potentes conocimientos de física y matemáticas, junto con su formación pionera en las teorías de Newton que contrastaba con los enfoques tradicionales de sus colegas, hicieron de Bassi una figura clave en la difusión de la ciencia newtoniana en Italia. Esta fama que adquirió con su docencia privada le valió también un aumento de sueldo, que ella reclamó, en la universidad.

En 1776, cuando Paola Battista Balbi murió, dejando una vacante en la Cátedra de Física Experimental del Instituto de Ciencia, ligado a la Academia de Ciencia, el marido de Bassi era asistente de Balbi. A pesar de que él hubiera sido la opción más obvia para relevar a Balbi, Bassi presentó su candidatura. Finalmente, parece que por sus destacadas habilidades en matemáticas, fue ella la nombrada para ocupar dicha cátedra, con su marido, Veratti, como su asistente; siendo nombrada además Presidenta del Instituto. Cuando Bassi murió dos años más tarde, su marido asumió el cargo y posteriormente fue sucedido por su hijo Paolo que mantuvo el cargo hasta 1796.




Publicó más de treinta trabajos, de entre ellos una buena parte fueron sobre física newtoniana y cartesiana, siendo de las primeras personas que explicó física newtoniana en Italia. Algunas de sus disertaciones en latín fueron publicadas en los “Comentarios del Instituto de Bolonia” y muchas de sus conferencias se han conservado manuscritas.

Honores
Un cráter del planeta Venus fue bautizado Bassi en su honor.

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