Hoy, la Sociedad Palestina de Socorro Médico ( PMRS ) lamenta la pérdida de una de los suyos. La enfermera voluntaria de 21 años Razan Al Najjar (13 de septiembre de 1997- 1 de junio de 2018) fue asesinada a tiros por un francotirador israelí en Gaza mientras intentaba proporcionar primeros auxilios a un manifestante herido. Ella recibió un disparo en el pecho, la bala rasgó a través del chaleco blanco con el emblema rojo y el logotipo de PMRS que la marcaba como personal médico. Otros 3 primeros asistentes de PMRS fueron heridos por balas. En total, Israel ha herido a 245 paramédicos desde fines de marzo, 29 de ellos con munición real y 40 ambulancias. Disparar al personal médico es un crimen de guerra en virtud de las convenciones de Ginebra, al igual que disparar contra niños, periodistas y civiles desarmados. Exigimos una respuesta internacional inmediata a las violaciones del derecho humanitario israelí en Gaza. Llamamos a nuestros amigos y socios internacionales a condenar públicamente el asesinato de Razan y exigir que Israel sea considerado responsable de sus crímenes según el derecho internacional. Nos lamentamos con su familia y nuestros colegas en Gaza durante este trágico momento.
Tomado de la declaración del Dr. Mustafa Barghouti, presidente del médico voluntario de PMRS
En la Franja de Gaza, miles de palestinos se congregaron el sábado en el funeral de Razan al-Najjar, una enfermera de 21 años de edad a la que un francotirador israelí mató de un disparo el viernes mientras la joven ayudaba a evacuar a palestinos heridos, durante una manifestación de protesta que tenía lugar cerca de la valla que separa la Franja de Gaza de Israel. El francotirador israelí le disparó en el pecho, sin tener en cuenta que llevaba un chaleco que la identificaba como personal médico, además de una identificación médica, en el momento de su muerte. En total, el Ejército israelí ha causado la muerte de al menos 119 palestinos y les ha ocasionado heridas a más de 13.000, como parte de una brutal represión contra las manifestaciones palestinas conocidas como la “Gran Marcha del Retorno”, que son de carácter no violento y exigen el fin de la ocupación israelí. Las siguientes son las palabras de la madre de Razan, Sabreen al-Najjar.
Sabreen al-Najjar expresó: “El mundo entero fue testigo de lo que le sucedió a mi hija, y estoy pidiendo protección internacional. ¿Dónde está la protección internacional? ¿Dónde están los derechos humanos? ¿De qué manera era mi hija una amenaza? ¿Cuál era su arma? Esta era su arma: sus equipos médicos. Esta era el arma de mi hija: su manera de resistirse. ¿Con qué fundamentos la mató el soldado que le disparó? Había sido perseguida desde el primer día de las protestas. Sobrevivió a la muerte en numerosas ocasiones. Ella salía adelante y me contaba lo que había vivido. Que Dios haga responsable a todos aquellos que callen sobre esto”.
http://pmrs.ps/details-razan.php
https://cnnespanol.cnn.com/2018/06/03/su-unica-arma-era-su-chaleco-medico-palestinos-lloran-a-enfermera-muerta-por-fuerzas-de-israel/
Es terrible comprobar como las victimas de ayer pueden ser los verdugos de hoy
ResponderEliminarLo mismo pensamos !!
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